Honestidad y Fe: Una Reflexión Basada en Mateo 5,33-37

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Honestidad y Fe: Una Reflexión Basada en Mateo 5,33-37

2024-06-15 Honestidad y Fe Integridad cristiana Reflexiones Pastorales 0

Lectura del santo evangelio según san Mateo (5,33-37):

En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Habéis oído que se dijo a los antiguos: «No jurarás en falso» y «Cumplirás tus votos al Señor.» Pues yo os digo que no juréis en absoluto: ni por el cielo, que es el trono de Dios; ni por la tierra, que es estrado de sus pies; ni por Jerusalén, que es la ciudad del Gran Rey. Ni jures por tu cabeza, pues no puedes volver blanco o negro un solo pelo. A vosotros os basta decir «sí» o «no». Lo que pasa de ahí viene del Maligno.»

Palabra del Señor.

La Importancia de la Honestidad:

La lectura de hoy nos invita a reflexionar sobre la integridad y la honestidad en nuestras vidas. Jesús nos dice que no debemos jurar en falso, sino que nuestro “sí” sea “sí” y nuestro “no” sea “no”. En un mundo donde las palabras a menudo se usan de manera ligera, esta enseñanza nos recuerda el valor de la verdad y la transparencia. En nuestra vida diaria, la honestidad nos permite construir relaciones basadas en la confianza y el respeto mutuo.

El Valor de la Palabra:

En nuestra comunidad y en nuestro trabajo, la palabra tiene un peso significativo. Jesús nos exhorta a ser personas de palabra, fieles a nuestros compromisos y promesas. Esto implica ser coherentes entre lo que decimos y lo que hacemos, reflejando así nuestra fe en cada acción. En la parroquia y los movimientos apostólicos, ser fieles a nuestra palabra fortalece el testimonio de nuestra fe y contribuye a la unidad y armonía en nuestras comunidades.

La Sencillez en el Hablar:

Jesús nos invita a hablar con sencillez y claridad, evitando juramentos innecesarios. La sencillez en el hablar refleja una vida interior ordenada y un corazón sincero. En nuestras conversaciones cotidianas, tanto en el hogar como en el trabajo, debemos esforzarnos por ser claros y directos, evitando dobles intenciones o palabras que puedan herir. Así, cultivamos un ambiente de confianza y respeto donde la comunicación fluye de manera saludable y constructiva.

La Confianza en Dios:

Al vivir de acuerdo con esta enseñanza, depositamos nuestra confianza en Dios, creyendo que Él guiará nuestras palabras y acciones. Esta confianza se traduce en una vida de fe auténtica y comprometida, donde buscamos siempre la verdad y la justicia. En nuestros apostolados, esta confianza nos impulsa a ser testigos valientes del Evangelio, promoviendo una cultura de integridad y honestidad en todos los aspectos de nuestra vida.

Aplicación Práctica en la Comunidad:

En nuestra parroquia y en los movimientos apostólicos, estas enseñanzas pueden transformar nuestras interacciones y proyectos. Al comprometernos a hablar con verdad y sencillez, creamos un ambiente de cooperación y respeto. La honestidad en nuestras palabras fortalece la credibilidad de nuestras acciones pastorales y fomenta un espíritu de comunidad. Así, nuestra vida se convierte en un reflejo del amor y la verdad de Cristo, inspirando a otros a seguir su camino.